Migraciones de los peces que se crían en cautividad
Algunos de los peces que se crían en cautividad, en estado salvaje, son migratorios como los salmones, los atunes, las doradas, las tilapias o los pangasius.

Los peces representan uno de los grupos con mayor número de especies migratorias. El principal motivo de las migraciones es la reproducción, pero también pueden migrar para alimentarse o por condiciones climáticas. Las migraciones pueden ser dentro de la misma cuenca fluvial, a través del océano, del mar a los ríos o de los ríos al mar, dependiendo de la especie de pez.
Algunos de los peces que se crían en cautividad, en estado salvaje, son migratorios como los salmones, los atunes, las doradas, las tilapias o los pangasius.
Salmones:
Nacen en aguas dulces, migran a los océanos cuando alcanzan la madurez, pasan su vida adulta en el mar y vuelven al río para desovar.
El salmón Atlántico (Salmo salar), que es el que se cría en piscifactorías, puede recorrer hasta 6.000Km desde su río de origen hasta las zonas de alimentación en el océano Atlántico (regiones templadas y árticas).
Cuando alcanza un cierto peso, migra a través del océano, principalmente por Groenlandia, de vuelta al río donde nació, el cual puede estar tanto en el lado americano como europeo del océano Atlántico.
Tras el desove la mayoría mueren, pero algunos sobreviven y repiten la migración hacia el océano y de vuelta al río para reproducirse por 2ª vez.
Atunes rojos:
Realizan extensas migraciones entre las áreas atlánticas de alimentación y los lugares de reproducción, bien en el Golfo de México (la población occidental), bien en el Mediterráneo (la población oriental).
Pasan el invierno alimentándose en el Atlántico Norte y en primavera migran para reproducirse en aguas cálidas del Mediterráneo y del Golfo de México. En verano, después del desove, vuelven al Atlántico en busca de comida.
Al igual que el Salmón, presenta una conducta de retorno al lugar de nacimiento y fidelidad a la zona de reproducción.
Doradas:
Presentan migraciones tróficas, especialmente los alevines que nacen en mar abierto y migran a principios de primavera hacia aguas costeras protegidas, como lagunas de agua salobre, estuarios y zonas litorales, donde tienen más recursos para alimentarse y temperaturas más suaves.
Permanecen en estas áreas hasta mediados de otoño, cuando comienzan a migrar a zonas de mayor profundidad, donde los peces adultos se reproducen.
También los adultos frecuentan zonas litorales durante el verano, para migrar a profundidades mayores de 30 m en invierno.
Tilapias:
Aun siendo una especie de agua dulce, habita y coloniza con éxito aguas salobres. Por lo que pueden migrar entre agua dulce y salada, para alimentarse o hibernar.
Pangasius:
Migra aguas arriba de los ríos en busca de refugio en la estación seca, para luego retornar aguas abajo hacia hábitats de desove, alimentación y guardería cuando llegan las lluvias, siguiendo el ciclo anual de los Monzones.