Bienestar intestinal en las aves – La clave es un enfoque holístico
El éxito económico de una explotación avícola está directamente relacionado con el binestar intestinal. Mantener el bienestar intestinal en las aves es básico para lograr la eficiencia de producción deseada del lote. Además, el bienestar intestinal en las aves, también puede tener impacto en la seguridad alimentaria.

Índice de Contenidos
El éxito económico de una explotación avícola está directamente relacionado con el binestar intestinal. Mantener el bienestar intestinal en las aves es básico para lograr la eficiencia de producción deseada del lote. Además, el bienestar intestinal en las aves, también puede tener impacto en la seguridad alimentaria.
La mejora genética obtenida en las últimas décadas en la tasa de crecimiento y de conversión alimenticia en pollo de engorde ha supuesto una gran presión para su sistema digestivo, y los ha hecho más propensos a sufrir trastornos entéricos, que causan grandes pérdidas económicas anuales a la industria avícola a nivel mundial.
Causas de trastornos intestinales en aves
Un error habitual cuando se habla de bienestar intestinal es centrarse únicamente en el control de trastornos entéricos de origen infeccioso, como la coccidiosis o la enteritis necrótica. Estas enfermedades suelen tienen varios factores predisponentes, condiciones estresantes que alteran la ingesta de alimento y la absorción de nutrientes, disminuyendo la motilidad intestinal, alterando el equilibrio del sistema digestivo y facilitando la proliferación de los microbios.
Por lo tanto, se deben considerar varios elementos para el diseño de una estrategia que logre mantener el bienestar intestinal de los animales. Entre los puntos a evaluar se encuentran: la alimentación, el alojamiento, el manejo, la bioseguridad y el estado sanitario de la explotación.
En las últimas décadas, cuando alguno de los factores mencionados causaba la proliferación bacteriana, el control se había basado en el uso de antibióticos promotores del crecimiento (ACPs). Sin embargo, existe una tendencia creciente a limitar y reducir la utilización de antibióticos debido a la aparición de cepas de bacterias resistentes, y también debido al interés de los consumidores en evitar el consumo de productos que puedan contener trazas de ACPs.
Mantener el bienestar intestinal en las aves y lograr un rendimiento adecuado sin el uso de antibióticos es un desafío que puede lograrse mediante la combinación de diversas herramientas, que incluyen prácticas de manejo, bioseguridad y alimentación, combinadas con el uso de aditivos alimentarios alternativos.
Puntos clave para mantener el bienestar intestinal en las aves
Comprender el papel de los factores mencionados anteriormente es crucial para planificar estrategias que mejoren la funcionalidad intestinal, promuevan el equilibrio de la microbiota y aseguren una utilización adecuada de los alimentos.
Por lo tanto, el mantenimiento del bienestar intestinal debe basarse en trabajar en el bienestar general del huésped, la integridad y barrera de la mucosa intestinal y el control del ecosistema microbiano, incluida la modulación de la microflora intestinal y el control de patógenos intestinales. Existen diferentes aditivos alimentarios que son eficaces para estos diferentes propósitos.
-
Mantenimiento de la integridad intestinal
La eficiencia de la absorción de los nutrientes depende del bienestar y la integridad de la mucosa intestinal. Cuanto más largas y saludables sean las vellosidades, mayor será la superficie de absorción y mejor será la barrera física entre la luz intestinal y la sangre. El revestimiento de los enterocitos está sellado por uniones estrechas, que evitan la entrada de tóxicos y patógenos a la sangre y controlan la respuesta inflamatoria.
Los pronutrientes son moléculas activas de extractos vegetales que tienen un mecanismo de acción metagenético. Estimulan la síntesis de proteínas funcionales en las células diana, mejorando la funcionalidad celular. Hay varios tipos de pronutrientes, que tienen diferentes células diana. Además, muestran unas ventajas adicionales: al ser una solución natural, no hay riesgo de resistencias y no dejan residuos en los productos, por lo que no tienen tiempo de retiro.
Los enterocitos son la célula diana de los pronutrientes acondicionadores intestinales. Este tipo de pronutrientes favorecen la fisiología de los enterocitos, potenciando su correcta regeneracióny su función de barrera defensiva.
Existen diversos ensayos in vitro que demuestran que los acondicionadores intestinales inducen la expresión de genes relacionados con la adhesión celular, la proliferación, los cilios, las vesículas y el metabolismo de los enterocitos. Por lo tanto, los acondicionadores intestinales son capaces de promover la actividad de los enterocitos y la integridad intestinal, mejorando la absorción de nutrientes y la función de defensa.
Los acondicionadores intestinales son altamente recomendables para mejorar el bienestar y el desarrollo intestinal, mejorar el crecimiento y reducir la tasa de conversión. Como ejemplo, se muestra a continuación los resultados experimentales obtenidos por el uso de acondicionadores intestinales, extrapolados a 1 millón de pollos de engorde, donde se aumenta la producción de carne en 147 toneladas al tiempo que se reduce la utilización de alimento en 324 toneladas, en comparación con animales que recibieron BMD y halquinol.
-
Control de patógenos intestinales y compuestos tóxicos
El reto microbiano y tóxico presente en el alimento debe ser un parámetro bajo evaluación continua. Existen patógenos que pueden afectar directamente al intestino, incluidos virus, como el rotavirus; bacterias como E. coli y Salmonella; hongos, como Candida, y parásitos, como Eimeria.
– Bacterias y hongos
Para minimizar el riesgo de deterioro del alimento causado por hongos, deben implementarse medidas de protección, como el uso de conservantes alimentarios. Para el control de los desafíos por patógenos intestinales se utiliza una solución antimicrobiana. Actualmente, hay disponibles soluciones microbiocidas naturales para controlar los desafíos existentes en la alimentación y en el intestino.
El anillo de cimenol es uno de los más conocidos por sus propiedades fungicidas y bactericidas de carácter selectivo. Las evaluaciones en animales vivos han demostrado su efectividad para reducir la colonización de varias bacterias patógenas, como Clostridium perfringens, E. coli, Salmonella, Campylobacter, y también la promoción de un ecosistema microbiano beneficioso, reduciendo la población de bacterias reductoras de sulfato y aumentando la población de Lactobacillus, lo que conlleva una mejor salud del tejido intestinal.
Esto significa que las propiedades antimicrobianas del anillo cimenol son útiles y efectivas para prevenir el deterioro del alimento y también para controlar la microbiota intestinal y los trastornos intestinales infecciosos, favoreciendo la flora beneficiosa y controlando el crecimiento de bacterias patógenas como Clostridium perfringens, E. coli y Salmonella.
Las soluciones más utilizadas son productos a base de ácidos orgánicos (también denominados acidificantes). La superioridad del anillo cimenol sobre los ácidos orgánicos se demuestra claramente en el siguiente gráfico, donde el anillo cimenol (0,5 kg/t) logra una reducción del 100% en el recuento de CFU de hongos en el alimento para pollos de engorde, en comparación con los ácidos orgánicos (2 kg/t), que solo lo reducen en un 32%.
– Parásitos
El parásito intestinal más conocido en las aves de corral es Eimeria, especialmente patógeno en pollos de engorde. Prevenir la infestación por coccidios es clave para prevenir infecciones bacterianas adicionales que pueden aparecer una vez que se produce la pérdida de la integridad intestinal, como la enteritis necrótica causada por Clostridium perfringens.
Una estrategia novedosa para prevenir la coccidiosis es realizar un control inmunológico de la enfermedad, mediante el uso de suplementos dietéticos naturales como los pronutrientes optimizadores intestinales.
Los pronutrientes optimizadores intestinales mejoran la inmunidad local del intestino, ya que estimulan la expresión de interleuquinas (IL-1, IL-12, IL-18) en las células polimorfonucleares intestinales (PMN). Las interleuquinas son proteínas que actúan como mediadores químicos en la respuesta inmune celular y atraen las células de defensa hacia la zona afectada, jugando un papel fundamental en la respuesta a la invasión por coccidios.
Por esta razón, los optimizadores intestinales son utilizados en el control de la coccidiosis, ya que estimulan fisiológicamente la inmunidad intestinal del animal para luchar contra la coccidia.
Los optimizadores intestinales son una gran herramienta a incluir en el plan anticoccidial de la explotación, ya que ofrecen gran versatilidad, permitiendo un reemplazo total o parcial de los coccidiostatos, como un período de ‘limpieza’ tras el uso de químicos, y también pueden ser utilizado como complemento de los programas de vacunación.
Las ventajas de utilizar optimizadores intestinales se demuestran a través de los resultados productivos obtenidos: la sustitución parcial de un coccidiostato desde el día 22 consiguió un mayor peso (+ 2,88%), mientras que la utilización “on top” consiguió un aumento del 9,7% en el peso final y una menor FCR (-4%) y mortalidad (-6%). Cuando se combina con la vacunación, también es visible una reducción en la mortalidad por coccidiosis (-34%) y en el recuento de ooquistes (20%).
– Micotoxinas
Los captores de micotoxinas deben incluirse en el pienso para adsorber las micotoxinas y evitar sus efectos negativos en el intestino y los órganos internos. El Silicoglicidol es una molécula patentada que, gracias a un importante proceso de investigación y tratamiento, consta de una estructura optimizada, que la convierte en la molécula captadora más completa y segura del mercado.
La estructura optimizada de Silicoglicidol asegura un amplio espectro de acción y una alta efectividad a baja dosis. Además, está demostrado que no captura aminoácidos ni vitaminas de la dieta, a diferencia de otros captadores, y mantiene su efectividad independientemente de las condiciones de pH en el intestino.
Diferentes ensayos comerciales demostraron que la administración de Silicoglicidol a 0,5 kg/t en 1 millón de pollos de engorde permite reducir la utilización de alimento hasta en 18 toneladas al tiempo que mejora la producción de carne hasta en 10 toneladas. Gracias a las características del Silicoglycidol, se ofrece una solución con una gran relación beneficio/economía.
-
Mantenimiento del bienestar general del animal
El manejo, los factores ambientales, la alimentación, el estado general de salud y la bioseguridad deben considerarse siempre como potenciales factores de estrés que pueden afectar el bienestar del hospedador y, por lo tanto, repercutir en el consumo de alimento, el bienestar intestinal y la productividad.
El plan de vacunación, tanto en reproductoras como en pollitos, es básico para luchar contra enfermedades inmunosupresoras como la enfermedad de Newcastle, la bronquitis infecciosa o la enfermedad de Gumboro, ya que tienen un efecto preventivo sobre las alteraciones intestinales. Además, es importante cumplir con las prácticas de bioseguridad para evitar la entrada y propagación de patógenos y, por lo tanto, garantizar un bajo riesgo en la explotación. De esta manera, es menos probable alterar la inmunidad general y la función intestinal.
Un buen control de las condiciones ambientales es clave para el bienestar intestinal. Deben evitarse condiciones extremas de temperatura y humedad (ya sea por calor, frío, ambiente seco o muy húmedo) y variaciones drásticas en dichos parámetros. Una ventilación adecuada asegurará que no haya condensación y tendrá un efecto positivo en la humedad de la cama.
En cuanto a las prácticas de alimentación, el incremento en el número de fases dietéticas permite mejorar la precisión de la formulación de los piensos según las necesidades de los animales y evita el exceso de nutrientes, como grasas y proteínas, que pueden favorecer la proliferación microbiana. Es importante resaltar que la transición entre las dietas de iniciación y de crecimiento suele tener lugar a las 2-3 semanas de edad, cuando los animales jóvenes pueden aún no tener una microbiota estable. Debido a esto, hacer una transición más temprana y gradual de la dieta de inicio a la de crecimiento puede favorecer la reducción del desafío.
Los programas de control de calidad de la materia prima y los piensos deben ser estrictos, y obtener una composición bien equilibrada es obligatorio. El uso de enzimas exógenas permite mejorar la digestión de la fórmula y, con ello, genera un impacto positivo en el ahorro de costos. Se recomienda incluir una fórmula enzimática completa, a base de subtilisina, xilanasa, amilasa y celulasa, que aumenta la utilización de la dieta, mejorando así la eficiencia de conversión alimenticia y el rendimiento productivo.
Conclusiones
El intestino es un órgano clave para el bienestar en las aves y la productividad de la explotación. Existen diversos factores a tener en cuenta para optimizar el bienestar intestinal en las aves. Comprender las influencias que se tienen entre sí, junto con los defectos de cada granja, es clave para diseñar una estrategia adecuada que potencie la fisiología intestinal, el rendimiento y la salud del animal.
Para asegurar una correcta función intestinal, es necesario combinar varias medidas, incluidas las de manejo y alimentación, así como realizar una buena elección en el uso de aditivos alimentarios.
Los aditivos en alimentación animal son herramientas de gran utilidad en la estrategia para mantener el bienestar intestinal, dónde cada uno tiene como objetivo uno de los puntos críticos:
- Los acondicionadores intestinales, utilizados para mejorar la integridad intestinal, y con ello la productividad del lote. En investigaciones previas, por 1 millón de pollos de engorde se obtienen 147 toneladas más de carne mientras que se utilizan 324 toneladas de pienso menos, en comparación con BMD y halquinol.
- El anillo cimenol, indicado para el control de microorganismos patógenos en la alimentación y en el intestino. Es el microbiocida natural de elección frente a otras soluciones comercializadas: reducción del 100% de las CFU de hongos en la alimento para pollos de engorde en comparación con una reducción del 32% obtenida por los ácidos orgánicos.
- Los optimizadores intestinales, aplicados para la prevención de la coccidiosis. El control de la inmunidad intestinal permite obtener un peso final superior al de la monensina (+ 2,88%).
- El Silicoglicidol, incluido en el alimento para la prevención de las micotoxicosis. Su efecto positivo en la productividad se muestra de manera que, por 1 millón de pollos de engorde, se obtienen 10 toneladas más de carne producidas y se reduce la utilización de alimento en 18 toneladas.
- Las enzimas, que permiten mejorar la digestibilidad del pienso.
De este modo, las diferentes soluciones mencionadas favorecen el rendimiento de los animales y les permiten crecer hasta su máximo potencial genético.
Las soluciones mencionadas en el artículo son investigadas, desarrolladas, fabricadas y comercializadas por Biovet S.A. bajo los siguientes nombres comerciales:
- Acondicionadores intestinales: Alquernat Nebsui, disponible en presentación líquida y premix.
- Optimizadores intestinales: Alquernat Zycox, disponible en presentación líquida y premix.
- Anillo Cimenol: Alquermold Natural, disponible en presentación líquida y premix.
- Silicoglicidol: Alquerfeed Antitox, disponible en presentación premix.
- Núcleo enzimático completo: Alquerzim A, disponible en presentación premix.