Grasas animales usadas en nutrición porcina
Para la nutrición porcina, añadir grasas de origen animal es beneficioso, principal como fuente de energía, pero también como vehículo para las vitaminas liposolubles y el sabor que aporta a la carne.

¿Qué son las grasas animales?
Por la proveniencia, las grasas pueden ser de origen animal, vegetal y mezclas. Las grasas de uso animal pueden ser poliinsaturadas (de origen marino, como el aceite de pescado), insaturadas (de aves), moderadamente insaturadas (de cerdos), saturadas (de vacuno) y mezclas de ellas.
Las grasas de origen animal son las grasas obtenidas de pollos, cerdos o vacunos, pero también las que provienen de la leche, como mantequilla, queso y otros derivados lácteos y las que provienen del pescado, como el aceite de pescado.
La grasa animal se obtiene después de haber fundido el tejido grasiento del animal: de la carne de cerdo se obtiene la manteca, del cordero o vaca resulta el sebo y, por el desnatado de la leche, se hace la mantequilla.
Las grasas animales contienen colesterol y estimulan la producción de colesterol en el cuerpo humano. Proporcionan un gran aporte de calorías y un consumo exagerado pude llevar a la obesidad. El equivalente calórico de 450 gramos de grasa animal es de 3500 calorías.
En los últimos años, las grasas animales han ganado mala reputación, debido al colesterol alto y a los efectos nocivos para la salud humana, en especial para el corazón. Sin embargo, hay estudios que demuestran su aspecto positivo, cuando se consumen con moderación.
Grasa animal en la nutrición porcina
Para la nutrición porcina, añadir grasas de origen animal es beneficioso, principal como fuente de energía, pero también como vehículo para las vitaminas liposolubles y el sabor que aporta a la carne. Los lípidos presentes en el tejido muscular proporcionan jugosidad, ternura y buen sabor a la carne de cerdo.
La grasa en la dieta de los cerdos se tiene que introducir en un porcentaje entre 3 y 5% (representando entre 250 y 500 Kcal), teniendo en cuenta tambien la edad del animal y la raza. Al introducir suplemento de grasa, mejoran los parámetros productivos y la conversión alimenticia, por lo tanto, disminuyen los costes. La grasa contiene 2.25 veces más energía que el maíz y es una importante fuente de energía para el animal. La fuente de energía más utilizada para los cerdos es el maíz, seguida por las grasas de origen vegetal y animal.
Beneficios de la grasa animal en la alimentación porcina
En la alimentación porcina las grasas más frecuentes utilizadas son el aceite de soja o girasol y la grasa animal. La grasa animal se encuentra en formato sólido, mientras los aceites son líquidos.
Al estar en un estado sólido, la grasa animal necesita un equipo especial de calentamiento y un sistema adecuado de almacenamiento.
Como beneficios de la grasa animal en la producción porcina podemos mencionar:
En las cerdas, mejora la producción de la leche y la grasa de la leche, teniendo un efecto positivo sobre el peso de los lechones. Puede aumentar el peso al nacer y la supervivencia de los lechones. Mejora la longevidad de las cerdas y ayuda a mantener el rendimiento de estas en periodos de estrés calórico.
En lechones destetados incrementa la ganancia de peso y la eficiencia alimenticia. En la etapa de crecimiento, la grasa es muy importante como aporte de energía y mejora la tasa de deposición de tejido magro.
En cerdos en acabado, por cada 1% de grasa añadida se considera que aumenta la ganancia de peso con un 1% y mejora del índice de conversión alimenticia aproximadamente un 2%.
En todas las etapas de crecimiento, la grasa añadida ayuda a mantener el rendimiento durante el estrés calórico.
Mejoras en la calidad de la grasa animal
La alimentación de los cerdos es uno de los factores mas importantes para obtener carne de calidad. Debido a la autooxidación o enranciamiento, la grasa animal utilizada en dietas debe ser acompañada por antioxidantes. El enranciamiento puede afectar tanto la aceptación del alimento, como la salud del animal y la calidad del producto final.
Los antioxidantes que se utilizan con frecuencia, como BHA y BHT, se pueden acumular en la grasa de los animales y llegar a la cadena alimentaria. Aunque se ha demostrado que en pequeñas cantidades son seguros, si se sobrepasa el límite pueden dañar a la salud humana, aumentando el riesgo de cáncer.
Por lo tanto, recomendamos el uso de antioxidantes naturales, como los desarrollados y producidos por Biovet SA, Alquernat Antiox P y L y Alquernat Oxyfree P y L:
- Alquernat Antiox P y L están diseñados para prevenir la oxidación de las grasas, vitaminas y carotenos en el pienso. Combina las actividades antioxidantes sinérgicas de la vitamina C y la vitamina E.
- Alquernat Oxyfree P y L son antioxidantes naturales para pienso y grasas.