Impacto de las micotoxinas en la producción lechera
Artículo escrito por la Dra. Veterinaria Elvira Cano en el que desarrolla los principales aspectos de las micotoxicosis en el ganado bovino lechero

El objetivo del presente trabajo es conocer los principales aspectos de la micotoxicosis y sus repercusiones en el ganado bovino lechero.
Las micotoxinas más importantes en el ganado bovino lechero son las Aflatoxinas, Zearalenona, la Toxina T-2, la Ocratoxina y la Vomitoxina o Deoxinivalenol. Todas ellas ocasionan perdidas generales en los parámetros productivos, menor producción de leche, disminución del consumo de alimento, menor ganancia de peso y disminución de la eficiencia de conversión del alimento, además de los signos clínicos específicos de cada una de ellas.
Dentro de éstas, en el sector lácteo destacan las Aflatoxinas por su inminente influencia negativa en la alimentación del ganado bovino y la transferencia de aflatoxina a la leche, causando efectos perjudiciales sobre el bienestar y productividad del animal.
Las vacas tienen la capacidad de protegerse a sí mismas de los efectos nocivos de las micotoxinas debido al mecanismo de degradación de los microrganismos ruminales, desactivando así las micotoxinas.
Esta capacidad está directamente relacionada con el tiempo que el alimento pasa en el rumen, permitiendo que dichos microrganismos actúen correctamente. Es por ello, que en sistemas de producciones intensivas donde los animales ingieren mayores cantidades de alimento en menos tiempo para incrementar el rendimiento lechero, el riesgo de exposición a las micotoxinas incrementa, dificultando la degradación de estas en el rumen.
Los cambios en la composición del alimento y el alto porcentaje de concentrados ricos en proteínas en la dieta también afectan a la capacidad de degradación de los microrganismos del rumen.
Esto provoca que las micotoxinas superen la barrera ruminal y sean absorbidas vía intestinal, para su posterior distribución y efecto en los diferentes órganos que generalmente se debe a la alteración de los procesos enzimáticos alterando el estado de la salud de los animales.
Dentro de los tipos de intoxicación podemos distinguir intoxicaciones agudas, o crónicas las cuales causan disminución del consumo y en la producción láctea. Uno de los restos es identificar cuando las raciones contienen niveles bajos de micotoxinas. Las micotoxicosis subclínicas reducen la rentabilidad de las granjas por una disminución de la producción y la calidad de la leche, así como en el aumento de los gastos para tratar problemas secundarios.
AFLATOXINAS
Las Aflatoxinas son un grupo de micotoxinas sintetizadas principalmente por los mohos Aspergillus flavus y A. parasiticus, presentes en numerosas materias primas utilizadas en alimentación animal.
La Aflatoxina B1 es la de mayor consideración, ya que tras ser metabolizada en el rumen aparece en la leche como Aflatoxina M1. Para ella existe una estricta normativa debido a sus efectos adversos en la salud humana y animal, clasificadas como agentes carcinogénicos para humanos.
En vacas lecheras además de perdidas generales en la producción lechera mencionadas previamente, encontramos reducción de la fertilidad, el órgano blanco de acción fundamentalmente es el hígado, con lesiones hepáticas con congestión y hemorragia, acumulación de ácidos grasos en el hígado, el riñón y el corazón, produciendo encefalopatías y edemas en extremidades posteriores, vacas caídas en tetania, dolor abdominal, parálisis ruminal.
TRICOTECENOS
Dentro de éstos se destacan por su importancia clínica DON (deoxinivalenol, llamada también Vomitoxina) y la toxina T -2. Su detoxificación puede verse limitada por un bajo pH ruminal.
Los signos clínicos de toxicidad por tricotecenos incluyen fallos reproductivos, diarreas, gastroenteritis y lesiones, hemorragia intestinal
DON, afecta al hígado, y a lo que tiene referencia al sistema de detoxificación, una disminución significativa de la producción lechera y de la grasa en leche y aumentaron sensiblemente el número de células somáticas.
La toxina T-2 y sus derivados hidroxilados y acetilados tienen efectos citotóxicos e inmunodepresores, por lo cual constituyen un riesgo para la salud.
En vacas lecheras, la presencia de toxina T-2 puede ir relacionada con el rechazo del alimento, baja en la producción lechera, gastroenteritis, hemorragias intestinales y muerte. La toxina T- 2 está asociada con una marcada reducción de la respuesta inmunitaria en terneros, y en las vacas recién paridas.
ZEARALENONA
La Zearalenona debido a su actividad estrogénica sus efectos y los de sus metabolitos son los problemas relacionados con la reproducción, ciclos estrales anormales que pueden alterar la fertilidad y las glándulas mamarias.
Cuando la intoxicación es crónica se presentan anestros profundos acompañado de endometritis crónica con hipertrofia del músculo uterino.
FUMONISINA
La Fumonisina B1 y B2 son las más importantes, se metabolizan de forma relativamente lenta y deficiente en el rumen.
Los órganos dañados en los rumiantes son el hígado y el riñón, causando síndromes neurotóxicos, nefrotóxicos, edema pulmonar y cerebral, hepatotóxicos y lesiones cardiacas.
OCRATOXINA
Son producidas por diversos hongos, por lo que prevalecen tanto en áreas templadas como tropicales. La Ocratoxina A es la de mayor prevalencia, su efecto primario es la nefrotoxicidad. Afecta a los rumiantes; sin embargo, en un rumen con buen funcionamiento, se degrada rápidamente por lo que no son consideradas una amenaza en el ganado vacuno.
Por ello, en la última década se ha extendido la utilización de captadores de micotoxinas en alimentos destinado a rumiantes.
Biovet S.A ha desarrollado un proceso patentado, por el cual se modifica la estructura de silicatos naturales para formar una molécula patentada llamada Silicoglicidol, con una estructura que optimiza la adsorción de micotoxinas, ampliando el espectro de captación, las cuales no se desadsorben en ninguna de las condiciones del tracto digestivo, por lo que son expulsadas con las heces.