Visión industria y producción porcina (Parte I)

Parece pertinente antes de profundizar en el atractivo y dinámico sector de la producción porcina, considerar los avances de la última década y posibles proyecciones. Indudablemente en un mundo cada vez más globalizado en términos productivos, económicos, políticos y sociales, resulta difícil seccionar el sector abordando tan sólo cuestiones regionales, así es como intentaremos dar una visión global para ir posteriormente rescatando ciertas características relevantes (diferenciadoras o similares por región) para las futuras entradas del presente blog.
El porcino doméstico (Sus scrofa spp.) es criado en todo el mundo (salvo excepciones dadas por la cultura y/o religión de determinadas zonas). La producción porcina supuso 109.122.261,07 toneladas de carne de cerdos generadas en el año 2012 (FAO, 2014), con una cantidad de animales destinados a matadero para el mismo año de 1.394.493.497,01 lo que supone que cada animal generó 78,25 Kg de carne. Si bien es cierto la situación planteada anteriormente carece de verdadero rigor técnico porque sólo están considerados datos oficiales de los 50 países primeros en importancia para el sector, el resto de las cifras son estimaciones oficiales y no han sido considerados factores relevantes de índole zootécnico; se puede vislumbrar que la cifra aporta un gran sentido, si se quiere didáctico, a la hora de señalar que aún queda mucho por hacer en el sector para aumentar índices de rendimiento zootécnico, que sin lugar a dudas van de la mano con la mejora de la situación sanitaria.
Otro ejercicio en la misma línea es ver la cantidad de carne a disposición de cada persona en el mundo para el mismo año, es así como siguiendo la misma dinámica y utilizando las mismas fuentes podríamos decir que existió una disposición de 15,61 Kg de carne/año/persona. Quisiéramos insistir que esté cálculo no considera factores como población objetiva que estuvo en edad de consumir carne de cerdo, distribución de riquezas, diferencias culturales y religiosas, acceso a la proteína porcina a nivel mundial, la importancia de la disposición de las otras proteínas animales y otras muchas variables. Pero queda demostrado que es posible conseguir un aumento sustancial de disposición de carne de cerdo que acompañe a las demandas de consumo regionales de la población, situación que analizaremos más adelante.
En la fragmentación por importancia de volumen de toneladas de carne de cerdo generadas por cada continente tenemos que:
Fuente: Elaboración propia datos FAO, 2014.
Vemos que en orden de importancia está Asia que para el año 2012 generó más de la mitad de la cabaña porcina, luego Europa con un poco más de un 22%de la cabaña, América con un poco más de un 15%, África ya en una posición de importancia muy escasa con menos de un 2% y en último lugar Oceanía con un 0,57% de la cabaña porcina mundial.
La tendencia anterior se mantuvo para los años 2013, 2014 y es muy posible que como proyección se mantenga para el presente año 2015, dado que estamos hablando de la cabaña porcina propia de cada continente y que es destinada a generar carne de cerdo.
La situación anterior cambia radicalmente si consideramos la dinámica bajo la cual se comporta el mercado de la carne de cerdo a nivel mundial. En primer lugar debemos mencionar que es un mercado activo y por consecuencia se ve afectado por: -crisis de epizootias, el crecimiento demográfico, la variación de ingresos de la población, el nivel de urbanización, la variación en las preferencias y gustos de los consumidores en cuanto a niveles de sanidad e inocuidad alimentaria, el factor del bienestar animal (que cada día cobra mayor relevancia), los distintos tipos de producción, las distintas características zootécnicas de las líneas genéticas (clásica – industrial – intensiva, extensiva, orgánica, ecológica, por nombrar algunas)-.
Durante la próxima entrada veremos el comportamiento del mercado a nivel mundial.