Transparencia 55: Actualizando a Tucídides: nuevos paradigmas
Tucidides ( Alimos -460 , Atenas -395) escribía, en su obra Historia de la Guerra del Peloponeso Libro III 81_83, lo siguiente:
"Porque en las distintas ciudades los jefes de los partidos, recurriendo en ambos bandos a la seducción de los programas de acuerdo con su preferencia por la igualdad de derechos políticos para el pueblo o por una aristocracia moderada, con el pretexto de servir a los intereses públicos, se granjeaban una recompensa para ellos mismos; y luchando con todos los medios para imponerse sobre sus contrarios, se atrevieron a las acciones más terribles y llegaron mucho más lejos en la ejecución de sus venganzas, dado que no las infligían de acuerdo con la justicia ni con el interés de la ciudad, sino según los límites que en cada caso fijaba la complacencia de uno de los dos bandos; y bien con una condena obtenida por un voto injusto, bien haciéndose con el poder por la fuerza, estaban prestos a dar satisfacción a la rivalidad del momento. De esta forma, ni unos ni otros se regían por moralidad alguna, sino que aquellos que, gracias a la seducción de sus palabras, conseguían llevar a término alguna empresa odiosa, veían acrecentado su renombre. Y los ciudadanos que estaban en una posición intermedia eran víctimas de los dos partidos, bien porque no colaboraban en la lucha, bien por envidia de su supervivencia"
A pesar de que transcurrieron casi 2350 años Alissa Zinovievna "Ayn Rand O´Connor" (S. Petersburg 02 febrero 1905 – New York 06 marzo 1982) escribía, durante 1950, en su libro "Atlas Shrugged", lo siguiente:
"Cuando adviertas que para producir necesitas obtener autorización de quienes no producen nada, cuando compruebas que el dinero fluye hacia quienes no trafican con bienes sino con favores, cuando percibas que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias más que por su trabajo, y que las leyes no te protegen contra ellos sino, por el contrario, son ellos que están protegidos contra ti, cuando descubras que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un auto-sacrificio, entonces podrás afirmar, sin temas a equivocarte que tu sociedad está condenada"
Transcurridos 67 años más (2417 años desde Tucidides) en 2017 muchos ciudadanos empiezan a percibir que: "Algunos estados han pasado de proteger al inocente y perseguir a los culpables, a desplazar a los inocentes a la periferia del sistema y proteger a los culpables para, finalmente, perseguir a los inocentes y ensalzar a los culpables. Esta nueva visión tucidiana de los estados utiliza nuevos mecanismos y presenta nuevas caras públicas. Los emprendedores incautos que no quieren entrar en la dinámica de la corrupción son desplazados a la periferia y sufren la perdida de apoyo público, permisos, financiación privada intervenida por el estado y finalmente la pérdida de clientes y la muerte o la emigración. Mientras los empresarios fieles, muchos de ellos ni siquiera son empresarios, viven del sistema, tienen financiación privada y apoyo público, ganan clientes (en muchas ocasiones el estado) y crecen.
Los ciudadanos crédulos (creen que el estado debería ser el primer ciudadano, del país, en el cumplimiento de las leyes) cae una y otra vez en la trampa de las leyes hechas en favor del estado y en contra de los ciudadanos. Mientras los ciudadanos fieles al estado, aun sin ocupar cargo alguno se ven favorecidos por pequeñas mejoras en su calidad de vida como vivienda de protección oficial, becas…todas ellas obtenidas, eso sí, bajo un aparente sistema neutral de redistribución de la riqueza.
Para conseguir este status los políticos, fieles servidores del estado, fuerzan la ley aplicando reglamentos distintos según conveniencia. Un antiguo político dijo: Usted haga la ley y déjeme hacer el reglamento. Reglamento que es aplicado por leales funcionarios a las consignas políticas en nombre el interés nacional, la salud pública o la prevención de hipotéticos peligros casi nunca correspondidos con amenazas reales.
Para conseguir este status el gobierno presiona a los anunciantes de los medios de comunicación independientes, crea grupos de opinión en las redes sociales con la única finalidad de difamar a los inocentes y a los críticos. Así se hace imposible distinguir entre la verdad y la mentira, se instala el cinismo y la desconfianza entre la población y como consecuencia se polariza la sociedad y el gobierno aparece como salvador de una situación cuyo origen ha sido el mismo gobierno u órganos estatales dependientes del gobierno. Finalmente, al gobierno solo le queda, para perpetuar la situación, debilitar alguna parte de la educación, algunos derechos y libertades y algunos aspectos del bienestar. No es necesario eliminarlos todos solo aquellos temas estratégicos que permitan controlar la población sin aparecer como un monstruo opresor. Y lo más importante facilitar la salida psicológica a la población, especialmente a la juvenil, hacia la supuesta felicidad de la diversión superflua.
Como diría Tucidides: " aquellos que, gracias a la seducción de sus palabras, conseguían llevar a término alguna empresa odiosa, veían acrecentado su renombre. Y los ciudadanos que estaban en una posición intermedia eran víctimas de los dos partidos " ,como apostillaría Alissa Zinovievna: "no trafican con bienes sino con favores, cuando percibas que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias más que por su trabajo, y que las leyes no te protegen contra ellos sino, por el contrario, son ellos que están protegidos contra ti" y finalmente como podrían decir los ciudadanos de hoy: "Algunos estados han pasado de proteger al inocente de los culpables, a olvidar al inocente sin perseguir a los culpables para finalmente perseguir a los inocentes protegiendo a los culpables" o como ha definido algún ex-juez:" Al amigo el favor, al enemigo la ley vigente.