Editorial 7: Asociaciones
La asociaciones han tenido un notable exito, en las ultimas décadas, en especial aquellas que han concentrado su atención en el desarrollo y divulgación científica relacionados con una especie animal.
Las asociaciones de profesionales o de productores avícolas, porcícolas o de una especie rumiante son un ejemplo a seguir en muchos aspectos.
Durante muchos años estas asociaciones han sido la fuente de aprendizaje, de formación post-académica y de actualización de conocimientos que permitía a los profesionales adquirir las destrezas necesarias para ayudar al desarrollo del sector. Los productores y empresarios encontraban un lugar donde debatir los problemas derivados del encarecimiento de ciertas materias primas, convertidas en comodities, o el uso de nuevas fuentes de alimentación para sus animales o podían articular planes comunes ante amenazas sanitarias reales.
Sin embargo en el éxito residen los peligros que amenazan la vida de estas asociaciones. En primer lugar el éxito de sus simposiums o congresos les ha hecho evolucionar a ferias internacionales y les ha convertido en una posición apetecible por las administraciones públicas o por alguno de sus representantes. En segundo lugar la repercusión de la asociación en la vida pública, de algunos países eminentemente ganaderos, hace que quienes ocupan cargos en la misma tengan la tentación de usarlos como trampolín para saltar a la vida política nacional. En tercer lugar la pertenencia a alguna de estas asociaciones puede ser atractiva para aquellos políticos que introduciéndose en las mismas las usan como plataforma propia.
Y finalmente, en cuarto lugar existe el peligro, que algunas asociaciones, se conviertan en grupos de presión que tiendan a instaurar un oligopolio en su país, que promuevan barreras legales y tecnológicas, para evitar la entrada de la libre competencia afectando negativamente al mercado nacional en contra de los intereses de sus ciudadanos.
Desde Veterinaria Digital condenamos cualquiera de las 4 situaciones, que
acabamos de describir, demasiado frecuentes en la actualidad como ha podido constatarse en Europa con el ejemplo de Expoaviga.
Desde Veterinaria Digital animamos a los profesionales, productores y a sus directivos a no apartarse de la pureza de los objetivos iniciales lo que, finalmente, redundara en beneficio del sector y de la ciudadanía en general.
Desde Veterinaria Digital ofrecemos nuestro apoyo a aquellos grupos de
profesionales y productores que estén interesados en dar vida o en hacer resurgir aquellas actividades que como consecuencia de los 4 peligros citados hayan desaparecido o se hayan convertido en residuos de su posición inicial.