Origen del Sistema Óseo. Divulgación 19

La evolución del sistema nervioso, del que tratamos en webblogs anteriores, transcurre paralela a la aparición y evolución del sistema óseo.
La utilidad de los pares de ganglios del tronco encefálico relacionados con la vista, el olfato y el oído está vinculada a la aparición de un soporte rígido craneal con orificios por donde el sistema nervioso accede a la información exterior y a la aparición de una columna vertebral que soporte las extremidades.
En los fósiles marinos de Pikaia gracilens (570 millones de años), Haikouichthys ercaicunensis (530 millones de años) y de Myllokunmingia fengjiaoa (525 millones de años); así como en los fósiles de los peces marinos Pteraspidomorphi (443 millones de años) encontramos los ancestros más antiguos de los actuales vertebrados y por tanto el origen del sistema óseo actual.
Pikaia gracilens fue clasificado inicialmente como un gusano poliqueto, por su segmentación regular corporal, aunque en 1979 fue incluido dentro de los cordados, convirtiéndose en el ancestro más antiguo conocido de los vertebrados modernos, ya que posee una columna vertebral primitiva, de composición cartilaginosa, con medula espinal interna.
Haikouichthys ercaicunensis tenía cabeza y tronco diferenciados. La cabeza tenía entre seis y nueve segmentos regulares mientras que el tronco estaba compuesto por otro tipo de segmentos en forma de "V".
Myllokunmingia fengjiao disponía de 6 segmentos craneales diferenciados de los 25 segmentos en forma de "V" del tronco. Todos los segmentos eran cartilaginosos sin que existan indicios de biomineralización de los elementos de su esqueleto.
De estos fósiles marinos anteriores hasta la aparición de los primeros fósiles de peces sin mandíbulas (pteraspidomorfos) transcurren unos 90 millones de años y con ellos aparece el primer escudo óseo verdadero que cubre la cabeza. Aunque se trata de especies extinguidas, podemos considerar que, sus representantes actuales son los peces agnatos con interesantes características como son presencia de notocorda en estado larvario y adulto así como la presencia de un ojo pineal sensible a la luz (homologo a la hipófisis o 2º par ganglionar del tronco encefálico moderno)
Finalmente señalaremos que el actual sistema óseo está formado por células poco diferenciadas, y por tanto primitivas, denominados osteoblastos de forma ovoide y con abundantes prolongaciones ramificadas que les sirven para conectarse con otros.
Este tipo de células y este sistema óseo tienen una importancia vital en el posterior desarrollo del metabolismo del calcio y del desarrollo del sistema nervioso y del aparato locomotor.